En la Escuela Experimental PRoA, combinamos estándares académicos rigurosos con proyectos de investigación práctica, preparando a los estudiantes para los desafíos del futuro a través de experiencias de aprendizaje innovadoras.
Somos una escuela ProA con orientación en Desarrollo de Software. Combinamos formación académica con proyectos reales y metodologías activas. Promovemos trayectorias personalizadas y buscamos formar jóvenes críticos, autónomos y comprometidos con su entorno.
Nuestra escuela tiene como misión formar personas comprometidas con su comunidad, capaces de pensar soluciones reales a los problemas que nos rodean. Creemos que la educación no debe quedarse solo en los libros, sino que tiene que salir al mundo y transformarlo.
Por eso impulsamos proyectos que nacen de las ideas y preocupaciones de los estudiantes. Ya sea buscando maneras de cuidar el ambiente, ayudar a quienes más lo necesitan o mejorar aspectos de la vida cotidiana, cada proyecto es una oportunidad para marcar la diferencia.
Queremos que lo que se aprende en el aula sirva para actuar, para construir, para cambiar. Nuestra meta es que el conocimiento se convierta en acción, y que esa acción ayude a que la vida de las personas sea un poco más fácil.
Soñamos con una escuela que sea un espacio de creatividad, participación y compromiso social. Una escuela que inspire a sus estudiantes a mirar el mundo con ojos críticos, pero también con esperanza, y que los motive a buscar soluciones para construir un futuro mejor.
Nos proyectamos como una comunidad educativa que forma ciudadanos solidarios, responsables y capaces de liderar cambios positivos. Queremos ser reconocidos por promover proyectos que no solo enseñen, sino que también impacten de manera concreta en la vida de las personas.
Nuestra visión es una escuela que no se encierra, sino que se abre al entorno, dialoga con él y se involucra activamente para transformar la realidad.
En nuestra escuela impulsamos proyectos que combinan el aprendizaje con la acción. A través de la tecnología y la creatividad, buscamos resolver problemáticas reales, mejorar la calidad de vida y cuidar el ambiente.
Este dispositivo se entierra en el suelo y mide la humedad en distintas capas gracias a sensores colocados a diferentes profundidades. Los datos se visualizan en una pantalla LCD y se envían por SMS.
Un mini invernadero de 1m x 1m con techo de botellas recicladas, riego automático por sensores de humedad y ventilación inteligente según temperatura.
Fuimos invitados a presentar nuestros proyectos en uno de los eventos agropecuarios más importantes de Argentina, donde más de 200,000 visitantes conocieron nuestras innovaciones.